Focaccia
Si hace 10 años me hubieran dicho que en el 2020 iba a poder hacer una Focaccia jamás lo hubiera creído. Yo? Haciendo pan en mi casa? Era una idea demasiado remota!
Y la realidad es que la receta base de los panes que he intentado hasta ahora no tienen más que harina, agua, levadura y MUCHA paciencia. De esta última tengo muy poca pero he aprendido a aumentarla!
La Focaccia es perfecta para cualquier momento del día! Para un sandwich en la mañana, para picar antes del almuerzo, merendar en la tarde o comer con la cena.
Confieso que la primera vez que hice Focaccia entendí que el tiempo ayuda a desarrollar la levadura y a hacer que cualquier pan tenga carácter y mejor sabor.
Esta receta es larga pero fácil! Atrévete a hacerla!
Receta inspirada en la Focaccia de Monica Sahmkov.
Ingredientes:
Para el pre-fermento:
75 gr de harina todo uso
75 gr de agua a temperatura ambiente
1 gr de levadura instantánea
Para la focaccia:
425 gr de agua a temperatura ambiente
5 gr de levadura instantánea
20 gr de miel
500 gr de harina todo uso
20 gr de sal
Aceite de oliva para engrasar el molde y manejar la masa
Sal gruesa, romero fresco, tomates picados, zaatar, etc
Paso a Paso:
Para hacer el pre-fermento mezcla con una cuchara en un recipiente que puedas cerrar, la harina, el agua y la levadura instantánea. Déjalo en una esquina oscura de tu cocina por 12 horas. Por lo general yo lo preparo en la noche antes de irme a dormir.
12 horas después comienzas a preparar la masa de la Focaccia. En un bowl mezcla el agua, la levadura instantánea y la miel. Agrega el pre-fermento y mezcla. Por ultimo agregarás la harina todo uso ya combinada con la sal. Mezcla muy bien, se formará una masa rústica. Para mezclar yo utilizo una cuchara de madera. Tapa el bowl con papel envoplast y un paño limpio por encima y déjalo reposar en esa equina oscura de tu cocina por 1 hora.
Pasada la primera hora la masa ha duplicado su volumen y es cuando harás el primer “fold” o doblado manteniendo la masa en el bowl; moja tus dedos con agua, vas a agarrar cada esquina de la masa y llevarla hacia el centro hasta formar una bola. Ahí le das la vuelta a la masa, tapas el bowl con papel envoplast y un paño limpio y la dejas reposar nuevamente por 1 hora.
Pasada la segunda hora engrasa con aceite de oliva la bandeja o molde donde hornearás la Focaccia (yo utilicé una bandeja rectangular), repite el mismo proceso de “fold” o doblado manteniendo la masa en el bowl y al terminar vierte la masa en la bandeja previamente engrasada. Moja tus dedos en aceite de oliva y con la masa en la bandeja realiza un doblez “tipo sobre o carta” llevando cada lado del rectángulo hacia el centro, se formará un “sobre” y ahí le das la vuelta. Tapa la bandeja con papel envoplast y un paño limpio por encima y déjala reposar nuevamente por 1 hora.
Pasada la tercera hora, agrega un poco de aceite de oliva sobre la masa (1 cucharada es suficiente) y repite el proceso anterior de doblez “tipo sobre o carta”. Tapa la bandeja con papel envoplast y un paño limpio por encima y déjala reposar nuevamente por 1 hora.
Pasada la cuarta hora repite de nuevo el proceso anterior.
Pasada la quinta hora repite de nuevo el proceso anterior.
Pasada la sexta hora, precalienta el horno a 420 degF, destapa la bandeja, estira la masa por toda la bandeja y déjala reposar por 30 minutos.
Una vez cumplidos los 30 minutos agrega un poco de aceite de oliva sobre la masa (1 cucharada), sal gruesa y con los dedos índice, medio y anular de tu mano harás los huecos distintivos de la Focaccia, introduciendo los 3 dedos al mismo tiempo por toda la masa. Agrega los toppings que desees y lleva al horno por 30 minutos.
Pasados los 30 minutos saca tu Focaccia del horno, déjala reposar unos 5 minutos y llévala a tu bandeja para servir.
TIPS:
Me gusta hacer mis Focaccias de 3 sabores, por lo general utilizo romero, zaatar y tomates cherry picados.
Si te gusta el sabor del tomate deshidratado colócalo al sacar la Focaccia del horno (cuando siga caliente) de lo contrario se quemará con el calor del horno.
Sírvela tibia, recién salida del horno.
Puedes guardarla en un envase hermético y mantenerla en un lugar fresco por 2 días. Este pan es perfecto para hacer sandwiches, córtala a la mitad, rellena y tuesta.
También puedes envolverla en papel envoplast y congelarla. Cuando vayas a usarla déjala descongelar a temperatura ambiente y calienta 5-10 minutos en el horno o en el airfryer.